Varias ciudades han comenzado a plantear o discutir la idea de implementar carriles bici temporales.

Al cerrar temporalmente el tráfico de vehículos a motor, se libera el espacio para un carril bici temporal.

Por ejemplo, en este esquema hecho por el Cerema (Centre d’études et d’expertise sur les risques, l’environnement, la mobilité et l’aménagement):

O este otro hecho por Mobycon:

En Francia, varios alcaldes y representantes electos han planteado la idea de probar, para el período de desconfinamiento, intervenciones en forma de «urbanismo táctico». Este concepto, todavía poco conocido (aunque existe desde hace unos diez años), está ganando terreno poco a poco: consiste en desplegar rápidamente infraestructuras poco costosas y en hacerlas permanentes.

Medir la frecuentación de los proyectos temporales mediante los contadores Easy Zelt y tubos neumáticos.

Para conocer la frecuentación ciclista de las infraestructuras temporales existen dos soluciones de Eco-Contador especialmente diseñadas para ello: los contadores Easy-Zelt y los tubos neumáticos.

Easy-Zelt

El contador bucle magnético Easy-Zelt ha sido diseñado para instalarse de forma rápida y fácil, sin necesidad de obra civil: el bucle se “pega” en el asfalto y es autónomo en energía (se alimenta con una batería de 2 anos de duración).

Contador tubos neumáticos

El contador de tubos neumáticos de Eco-Contador está diseñado para realizar estudios de frecuentación. Son diferentes a los contadores de tubos tradicionales porque poseen una mecha anti rebote que permite diferenciar bicicletas de vehículos a motor.

A continuación, se presentan tres ejemplos de proyectos temporales que se han hecho permanentes gracias al uso de datos de frecuentación.

Puente de Piedra, Burdeos

Matthieu Sevère

El Puente de Piedra es un eje principal que cruza el Garona. Conecta el centro de la ciudad con el distrito de La Bastide en la orilla derecha, convirtiéndolo en una popular ruta ciclista. Se ha puesto en marcha un proyecto piloto para probar su cierre al tráfico de coches durante un año completo. Este proyecto ha despertado los temores y preguntas de los automovilistas y de políticos. Sin embargo, en julio de 2018, se tomó la decisión de cerrarlo definitivamente a los coches. De hecho, un informe publicado por la Metrópoli de Burdeos señaló un aumento del tráfico de bicicletas de +21% en el Puente de Piedra, ¡signo de un importante cambio modal!

Berges de Seine, Paris

Bautizada con el nombre del ex presidente de la República que la inauguró, la Vía Georges Pompidou es desde hace mucho tiempo sinónimo del «París motorizado», ya que la inauguración de la vía tuvo lugar en 1967 siguiendo su plan de autopistas para París. Símbolo de la planificación urbana destinada a «fluidificar» el tráfico en París, esta vía rápida será uno de los únicos logros del plan. Durante casi 30 años, se ha debatido la cuestión de cerrar esta vía al tráfico de coches. En 2017, el carril de la orilla oeste se reducirá temporalmente a un carril en lugar de dos para dar paso a un carril bici de doble sentido.

Se instaló un sistema de conteo de bicicletas para medir la evolución de la frecuentación. Tras varios años de batallas legales, los muelles fueron devueltos a los peatones y ciclistas y la Vía Georges Pompidou se convirtió en un importante eje de movilidad sostenible en París.

Con la ayuda de la plataforma Open Data creada por la ciudad de París, es posible medir sus efectos. ¡Se constata el impresionante aumento del tráfico de bicicletas en 2019! Este aumento está relacionado, entre otras cosas, con las huelgas del transporte público en el otoño de 2019, que generaron un cambio modal masivo hacia el uso de la bicicleta a finales de año. Sin embargo, sin estos acontecimientos excepcionales, el aumento de la frecuentación sigue siendo significativo, alcanzando +51% entre 2018 y 2019 si se comparan los períodos de abril-agosto de los dos años!

Frecuentación mensual del uso de la bicicleta en la vía Georges pompidou de París. Fuente: datos Eco-Compteur/ciudad de París publicados en la plataforma Open Data

Puente Burrard, Vancouver

(Jon Hernandez/CBC)

Hace diez años, se eliminó un carril para vehículos del puente Burrard de Vancouver y se construyó temporalmente un carril bici. Las críticas fueron generalizadas. Los críticos predijeron un caos general en el puente y en el centro de la ciudad. La cobertura de los medios de comunicación se centró en los conductores enojados que temían lo peor. Sin embargo, el carril bici permite a los ciclistas cruzar de forma segura entre una importante zona residencial de la ciudad y el centro de la misma.
Después de un año de prueba, el carril bici temporal se convirtió en permanente, gracias a los datos de frecuentación que mostraron que cerrar un carril motorizado para transformarlo en un carril bici permitía a más gente utilizar el puente como eje de vertebración de la ciudad.